Demoliciones GHB ha terminado el retiro de materiales con contenido en amianto en estado friable en la base naval de Rota. El amianto que al retirarse tomaba la propiedad de friable, tuvo que removerse bajo condiciones de confinamiento.Para ello demoliciones GHB construyo una unidad de confinamiento, que permite generar unas condiciones de depresión para poder así retirar el amianto friable en condiciones seguras.
Una unidad de confinamiento o burbuja tiene el objetivo de proteger a terceros de la exposición a amianto. La unidad de confinamiento se construye aislando, mediante la ejecución de un cerramiento perimetral, la zona donde se va a remover el amianto friable respecto al exterior.
El amianto al estar en estado friable en su remoción genera dispersión de fibras, estas serán controladas dentro de la burbuja mediante la diferencia de presión atmosférica respecto al exterior, de modo que si en la hermeticidad de la burbuja existe cualquier fallo, el aire sólo tienda a entrar dentro de la burbuja por diferencia de presión. La diferencia de presión en el interior de la burbuja se consigue mediante la instalación de unos depresores que al extraer el aire del interior de la burbuja junto con la acción de unos filtros HEPA, evitando así la salida de fibras de amianto. El control de la diferencia de depresión es controlada por un medidor.
La normativa española sólo exige la depresión en el interior de la unidad de confinamiento, sin marcar un mínimo. Para estos trabajos se marcó un mínimo de depresión atendiendo a criterios de normativa extranjera que fue de 15 Pascales de depresión, sosteniendo dicha medida durante todo el proceso
Una vez terminada la remoción del amianto, se realizó el test de reingreso a la burbuja, prueba que verifica la descontaminación interior de una unidad de confinamiento y que permite su apertura después de haber realizado los trabajos.
Por último se realizó la disposición final de los residuos en vertedero autorizado.